domingo, 30 de octubre de 2016

TAQUILLA USA. El Infierno de Tom Hanks

Halloween ha llegado a la cartelera, y con él las malas cifras. Es habitual en este fin de semana que los datos sean bajos, y el presente no ha sido una excepción. Y aún así, se coloca por encima del de hace un año, cuando ninguno de los estrenos podía, ni lo pretendía, acabar con el reinado de “The Martian”.

Sin embargo, en esta ocasión sí que había una película dispuesta a hacerse con el número uno con relativa facilidad. Y no ha podido. Ron Howard y Tom Hanks vuelven a la carga con la tercera entrega de las aventuras de Robert Langdon, y el tiempo que ha pasado entre “Angels & Demons” y el claro declive que sufría la saga tras esta primera secuela no auguraban nada bueno. Pero tampoco algo tan nefasto como lo que se ha producido. Inferno se conforma con unos pobres 15 millones de $ y la segunda plaza, lejos de las previsiones iniciales y dejando un mal sabor de boca en Sony y en la carrera de su estrella principal, que todavía saborea las mieles del éxito de Sully -122 millones de $ lleva amasados la cinta de Clint Eastwood-, y de su director, que recientemente ha visto cómo “In the Heart of the Sea” se convertía en un batacazo. Y pese a haber costado 75 millones de $, le va a costar poder considerarse rentable, a pesar de que por ahora su total en todo el mundo es de casi el doble, estreno en China incluido.

Sólo el debut del documental R de Jim Jarmusch sobre el grupo The Stooges Gimme Danger consigue captar la atención del público minoritario, con 44.025$ recaudados en tan sólo cuatro salas.

Por lo demás, buenos mantenimientos fruto de una cartelera sin competencia. Boo! A Madea Halloween repite en el podio con un descenso de lo más positivo, y con 52 millones de $ en diez días, superando a las dos entregas previas del personaje de Tyler Perry, y con los 80 millones ya casi asegurados.

No le va tan bien a Jack Reacher: Never Go Back, que parece arrastrar las malas críticas hacia la taquilla, cayendo este fin de semana un fuerte 58% y rozando los 40 millones de $, la mitad de lo que la anterior consiguió durante toda su vida comercial. No parece tener mucha fuerza para irse más allá de los 60 millones, y todo quedará en manos de la taquilla mundial, donde tampoco es que se esté luciendo. 93 millones de $ lleva hasta la fecha, y con territorios tan importantes como China ya conquistados. País en el que por cierto no ha acabado de entusiasmar.

El top 5 lo completan The Accountant, que sigue dando la sorpresa pese a las tibias críticas con 61 millones de $ en el bolsillo y el mismo ritmo que “Argo”, pero sin la ventaja de los premios, y Ouija: Origin of Evil, cuyos excelentes comentarios y críticas la hacen recuperar algo del terreno perdido en su estreno, yéndose a los 24 millones de $ en su segundo fin de semana. Además, no le va del todo mal en la taquilla mundial, con 43 millones de $ en total, partiendo de un presupuesto de sólo 9.

Del resto de la cartelera, destacar el formidable segundo fin de semana del drama R con Naomie Harris Moonlight, de nuevo con la mejor media por copia y con 1,4 millones de $ conseguidos. Uno de los títulos de la temporada de premios que ya está dando de qué hablar.

Por lo demás, la semana que viene la cartelera será totalmente renovada. Será Marvel la encargada principal de hacerlo con Doctor Strange, que ya ha desembarcado con éxito en otros países del globo, y superando las cifras de otros títulos marvelitas recientes como “Guardians of the Galaxy” o “Captain America: Winter Soldier”. 86 millones de $ le aseguran ya la condición de uno de los taquillazos del año.

Fuente: Box Office Mojo

domingo, 23 de octubre de 2016

TAQUILLA USA. Tyler Perry, Jack Reacher y una ouija levantan la cartelera

Fin de semana positivo en la taquilla USA, superior al de hace un año cuando ningún estreno despertaba el interés de la audiencia. En el que nos ocupa tampoco es que haya habido un estreno masivo que atraiga al público a las salas, pero los tres primeros puestos los ocupan tres productos que han convencido a los espectadores, aunque no todos a la crítica especializada.

Es el caso de Boo! A Madea Halloween, nueva entrega del personaje de Tyler Perry, que consigue el mejor dato de su carrera. Logra 27 millones de $, a pesar de ser el film con menor presencia en salas del top 5. Ha costado 20 millones, igual que sus exitosas predecesoras, y debería acabar sus días en torno a los 70 millones de $. Todo un éxito.

Los críticos tampoco acompañan al nuevo producto de acción de Tom Cruise, pero sí los espectadores. Jack Reacher: Never Go Back supera los datos de su predecesora y se planta con unos buenos 23 millones de $, superando ligeramente las expectativas. Ahora, con las malas críticas que está recibiendo, tocará ver hasta dónde llega. La anterior gustó, y el boca a boca fue lo suficientemente bueno como para permitirla llegar a los 80 millones de $. Veremos si esta lo consigue, aunque su esperanza está en el mercado internacional. 54 millones de $ ha recaudado en este fin de semana en todo el globo, contando con un presupuesto de tan sólo 60 millones de $. No será un Misión Imposible de la taquilla, pero será rentable.
La que sí viene arropada por buenas críticas es Ouija: Origin of Evil, secuela del inesperado éxito de 2014 que se convirtió en un taquillazo pese a los malos comentarios. Comentarios que parecen haber lastrado a esta nueva entrega, quedando por debajo de aquélla con 14 millones de $. Ahora bien, habiendo costado 9 millones de $, y pese a que lo tiene difícil para alcanzar los 50 millones de la anterior, la rentabilidad no debería ser un problema para un producto que buscará la salvación también en el mercado internacional y en la explotación en diversas plataformas.

La que no se salva de la quema es la comedia R de Fox Keeping Up with the Joneses, a la que tanto la crítica como el público sentencian con unos flojos 5 millones de $, pese al buen nombre de Greg Mottola y de un reparto con caras tan atractivas como las de Jon Hamm, Zach Galifianakis o Gal Gadot.

Es en el ámbito limitado donde encontramos los mejores resultados, y esta vez de verdad. Con medias con rozan los 100.000$ por sala han llegado el drama R afroamericano Moonlight y lo nuevo de Park Chan-Wook, The Handmaiden, ambas con posibilidades de entrar con fuerza en la carrera al Oscar. 414.740$ logra la primera en cuatro salas, mientras que la segunda se hace con 91.600$ en tan sólo una, a la espera de que ambas amplíen presencia y cosechen algún que otro premio.

La tercera en discordia en el ámbito limitado pertenece a un clásico. Michael Moore aprovecha la campaña presidencial para asestar un nuevo golpe con Michael Moore in Trumpland, y la jugada le vuelve a salir bien. 50.200$ en dos salas pero el inconveniente de ser un producto con fecha de caducidad.

A nivel de mantenimientos, el top 5 lo completan The Accountant, que cae del primero al cuarto puesto con un excelente mantenimiento y 47 millones de $ en diez días, y The Girl on the train, que parece interesar al público en vista de su buen aguante. Roza los 60 millones de $ en su tercer asalto. Les sigue Miss Peregrine´s Home for Peculiar Children, que en cuatro semanas se va a los 74 millones de $, superando ya además los 200 millones de $ en todo el globo. Cifras mejorables para Tim Burton, pero que no sirven para tildarla de fracaso, aunque tampoco de éxito.

Por último, destacar los incrementos del drama con Rachel Weisz, Denial, y de Certain Women, con Kristen Stewart y Michelle Williams, la primera cerca del top 10 y de los 2 millones de $, y la segunda con 157.850$ en diez días.

Fuente: Box Office Mojo

viernes, 21 de octubre de 2016

LA CRÍTICA. Nunca apagues la luz

Pocas luces
Extender la idea de un cortometraje a un producto de mayor duración no es tarea fácil. Es mucho más sencillo condensar y comprimir la capacidad de sorpresa e innovación en menos de treinta minutos que en más de una hora. Y es particularmente más difícil cuando el producto en cuestión pertenece al género de terror. 

No es que David F. Sandberg sea el paradigma del buen oficio cinematográfico. Sus cortos así lo demuestran. Un elemento que se repite una y otra vez para hacer entrar al espectador en materia e inquietarle, para luego asestar un golpe de efecto que le haga saltar de su butaca. Para entendernos, le falta el rodaje y la sutilidad de la que sí puede presumir su padrino, James Wan. Y dentro de sus numerosos cortos, es precisamente “Lights Out” el más inspirado, a pesar de que adolece de lo mismo que los demás de su limitada filmografía. Visto uno, vistos todos.

Si juntamos sendos elementos, el resultado no puede ser bueno. Y no lo es. En su traslación a la gran pantalla, esta “Nunca apagues la luz” se muestra incapaz de avanzar más allá de una premisa que, por si fuera poco, ya hemos visto antes. Concretamente en la filmografía de uno de los mejores cineastas del fantástico patrio, Jaume Balagueró. Sandberg se empeña en ahondar en la mitología de su monstruo, sin caer en la cuenta de que los caminos que transita ya han sido explorados con anterioridad. O quizá sí es consciente, pero el dinero llama al dinero.


Así, su debut no es más que un pastiche de lugares comunes, sustos de manual y una evidente y notable de falta de experiencia tras la cámara. Dirección tosca -consigue algún escaso momento relevante, pero ya explotado en los trailers-, actuaciones bastante discutibles -sólo Teresa Palmer se salva de la quema general-, detalles de guión que no congenian, y en resumen una falta absoluta de ingenio y planificación tras cada escena.


Pero tampoco se podía esperar mucho más vistos los antecedentes. Lo que queda a fin de cuentas es una película con muy poco ingenio y, paradójicamente, muy pocas luces, no muy alejada del sello Jason Blum. Pero en el mal sentido. Es decir, esto no es ni “Babadook” ni “Mamá”. Es lo más parecido a “Ouija” que nos podemos imaginar.

A favor: Teresa Palmer, y algún momento puntual
En contra: ya lo hemos visto antes

 Calificación *
Ni se moleste

lunes, 17 de octubre de 2016

LA CRÍTICA. La fiesta de las salchichas

Rebelión en el súper
Randal Kleiser usaba, en uno de los más célebres números musicales de su ya imperecedera “Grease”, la animación como herramienta de mensaje subliminal, en forma de salchicha que se introducía con gusto en un trozo de pan de perrito caliente, mientras John Travolta clamaba por el amor de su amada Sandy. En “La fiesta de las salchichas”, Greg Tiernan y Conrad Vernon en la dirección y los corrosivos Seth Rogen, Jonah Hill y Evan Goldberg en el guión parecen haber recogido este testigo, y el resultado es una versión distorsionada y grotesca de “Toy Story”, cambiando a los juguetes por unas viandas que bien podrían haber salido de la cabeza de Will Vinton.

21 años han pasado desde que Pixar nos maravillara con su primer largo de animación 3D, y no han parado de crecerle los enanos desde la competencia. Y aunque hemos tenido filmes enfocados tanto para adultos como para niños, estamos ante el primer producto digital enteramente dedicado a los más grandes de la casa. Este grupo de gamberros, que ya perpetraron anteriormente las magníficas “This is the end” o “Pineapple Express”, subvierten los códigos de la animación digital moderna, empezando por un feliz número musical de apertura que es toda una declaración de principios del nivel de incorrección política que puede llegar a alcanzar, a la vez que da una patada en los mismísimos a Disney y sucedáneos del cartoon más ñoño. Así, que nadie se asuste ni alarme si, en cierto punto de su metraje, “La fiesta de las salchichas” abraza sin tapujos el “Saló” de Pasolini, o juguetea con el metacine valiéndose de la mismísima “Stargate”.


Sin embargo, más allá de sus chistes soeces, de su irreverencia, de su alto contenido sexual, de sus coñas culturales -atención al momento Meat Loaf,y a las referencias cinematográficas y literarias, que van desde “Terminator 2” hasta “Los viajes de Gulliver”-, sociales y políticas, lo que sirve esta macarra sátira es una lúcida reflexión sobre la religión y las falsas deidades, sobre su capacidad de manipulación para las masas, y sobre su poder de alienación, erigiendo su particular versión del mercerismo.


Y no es por ello por lo que es una película arriesgada. Porque no es la primera vez que el cine se muestra como incómodo azote de sectarismos varios. Es arriesgada porque, dos décadas después de que Woody y Buzz entrasen en nuestros corazones, alguien tiene lo que hay que tener para entrar por otro sitio, por donde no da la luz del Sol, para usar la animación por ordenador como arma arrojadiza, para hacer verdadera leña del árbol caído. En ese sentido, esta particular “Rebelión en el súper” es a su subgénero lo que la catódica “South Park” fue a los dibujos animados de toda la vida. Y por ello no sólo es arriesgada, sino hasta cierto punto peligrosa, aunque sólo para todos esos espectadores que se acerquen a ella con sus familias desde la ignorancia y la inconsciencia, dejándose llevar por un envoltorio de lo más encantador y suculento. Cuidado, mucho cuidado.

A favor: su ingente carga de incorrección política y ateísmo, todo bajo un envoltorio de lo más suculento
En contra: que haya algún padre de familia que se acerque a ella desde la ignorancia

Calificación ****
No se la pierda 

domingo, 16 de octubre de 2016

TAQUILLA USA. Ben Affleck y su contable conquistan una débil cartelera

Octubre no acaba de brillar en la taquilla USA. Los tibios datos registrados hace una semana se han visto superados, en el peor sentido del término, por los de este fin de semana. Tan sólo 94 millones de $ recaudados, y sin ningún blockbuster potencial en la cartelera.

Y con todo, el número uno no ha entrado con mal pie. The Accountant venía rodeada de una buena imagen de cara al público, pero de críticas más bien negativas, que aún así no han impedido que la cinta protagonizada por Ben Affleck haya alcanzado unos buenos 24 millones de $. Gusta a los espectadores y su presupuesto es bastante modesto: 44 millones de $ que no tendrá problema alguno en rentabilizar.

En segundo lugar debuta Kevin Hart: What Now?, que mejora los datos de las dos anteriores cintas del cómico estadounidense, pero a costa de ser exhibida en un mayor número de salas. Aún así, los 12 millones de $ que han cosechado son todo un éxito para un film que ha costado tan sólo 10 millones. La anterior, “Kevin Hart: Let me Explain”, triplicó la cifra inicial. De seguir la misma tónica, estaríamos hablando de un resultado más que decente para Universal.

Los otros dos estrenos relevantes del fin de semana han pasado con más pena que gloria. Especialmente Max Steel, que se estrella con 2 millones de $ en la undécima plaza y con cero apoyo por parte de la crítica. Por su parte, la cinta de Jonás Cuarón con Gael García Bernal, Desierto, tampoco entusiasma especialmente, logrando 450.000$ en 73 cines, y tampoco rodeada de buenos comentarios.

Mejor le ha ido a la animada Miss Hokusai y la coral Certain Women –con Kirsten Stewart, Michelle Williams y Laura Dern, entre otras-, que en menos de cinco salas han logrado las dos mejores medias por sala de toda la cartelera. 25.042$ y 65.230$ han conseguido, respectivamente.

A nivel de mantenimientos, nada relevante más allá del top 5, si bien merece la pena destacar cómo The Birth of a Nation se desploma en su segundo asalto con tan sólo 12 millones de $ en diez días, a la espera de que la carrera al Oscar la salve. Por lo demás, The Girl on the Train cae mejor de lo esperado, yéndose a los 46 millones de $ en diez días –ha costado 45 millones-mientras que Miss Peregrine’s Home for Peculiar Children atesora 65 millones de $, cifra muy mejorable dado su presupuesto de 110 millones de $. Pero siempre mejor que lo que ha logrado Deepwater Horizon, 49 millones de $ partiendo del mismo presupuesto, pero la escasa posibilidad de triunfar fuera de sus fronteras.

Fuente: Box Office Mojo

lunes, 10 de octubre de 2016

LA CRÍTICA. Midnight Special

Cuentos asombrosos
En “Take Shelter”, Jeff Nichols cargaba de ambigüedad un relato apocalíptico que no se conformaba como tal hasta bien avanzado su metraje. En “Midnight Special”, el director de la también recomendable “Mud” realiza el proceso inverso. Va cargando el relato de misterio y va diseminando pistas durante su primera mitad, y se va adentrando lentamente en lo desconocido a lo largo de todo el metraje.

Pero con naturalidad. Porque si algo caracteriza a Nichols es la naturalidad con la que reviste sus historias. Una naturalidad fronteriza, mundana, muy propia de la América rural, creyente y recóndita. Aquí, el acercamiento que hace hacia la ciencia-ficción está cargado de cotidianidad, sin caer en los arquetipos de un blockbuster, sin abandonar nunca su naturaleza indie. Hay que saber ver más allá de sus referencias spielbergianas, las cuales son más accidentales que buscadas. Porque Nichols no es Spielberg, ni lo necesita. Tampoco lo intenta. Esto no es “Stranger Things”. Nichols no busca el homenaje. Y hay que acercarse a ella libre de estos prejuicios. Es más, hay que acercarse a “Midnight Special” con cierta predisposición por parte del espectador. Es mejor no saber demasiado sobre ella para dejarse llevar y disfrutarla.


Y he ahí una de sus poderosas armas. Su capacidad para no parecerse a nada ya visto, aunque ya lo hayamos visto antes. Es una obra personal e intransferible. Eso y la magnífica música de David Wingo, el elegante trabajo de su cineasta, y un reparto en estado de gracia, con dos de los mejores actores del panorama actual, Michael Shannon y Joel Edgerton, como cabeza de cartel, y una de esas actrices que con cada nuevo trabajo demuestra aún más si cabe su valía, Kirsten Dunst, sin olvidar a una de las estrellas de la función, al epicentro de la trama, el pequeño Jaeden Lieberher.


El resultado es una especie de traslación a la gran pantalla de uno de esos cómics que lee el pequeño Alton, una especie de “Cuentos Asombrosos” que atrapa con cada minuto que pasa, y que sigue la temática ya trazada por su realizador en sus dos anteriores obras. Porque en este especial de medianoche, lo que tenemos al fin y al cabo, es una figura paternal que trata de proteger a un hijo. Aunque ello implique perderle para siempre.

A favor: la naturalidad con que está abordada la propuesta, y lo mucho que su trama engancha
En contra: que haya quien no vea más allá de sus accidentales referencias

Calificación ****
No se la pierda

viernes, 7 de octubre de 2016

LA CRÍTICA. Swiss Army Man

Mi amigo Manny
No, esto no es una historia que roce la necrofilia. La abraza sin tapujos. Y sí, puede incomodar y repugnar a más de un espectador que no consiga entrar en su juego. Porque no es nada fácil.

“Swiss Army Man” no es un film fácil de clasificar. Consigue convertir lo putrefacto y soez en poesía. Gracias a su fotografía, al excelente empleo de la música fusionada de una manera peculiar con la trama –ojo al uso del “Cotton Eye Joe” o del tema central de “Jurassic Park” como referentes generacionales-, al formidable trabajo de su dúo protagonista –qué pareja hacen Paul Dano y Daniel Radcliffe-, y a la exquisitez y melancolía que desprende otro dúo, en este caso el formado por los debutantes Dan Kwart y Daniel Schinert –o los Daniel, como se hacen llamar- tras la cámara.

Porque lo que subyace tras esta fantasía cargada de nostalgia, lirismo y mucha ambigüedad, más allá de unas flatulencias y líquidos gastrointestinales que traspasan la pantalla, es una historia sobre el amor. Sobre el amor como bálsamo, como salvador de almas perdidas. Da igual si es entre dos hombres, y si uno de ellos está más muerto que vivo. Lo que importa en ella es cómo va forjando una amistad imposible y cómo esa amistad salva a sus dos protagonistas del olvido, de la soledad que impregna y cubre unas vidas que se están pudriendo con cada monótono día que pasa.


Pero hay que insistir, ésta no es una propuesta para todos los públicos. Habrá quien salga del cine con ganas de vomitar. Habrá incluso quien no llegue a verla entera, y acabe juzgándola por su superficie, como hacen algunos personajes durante el film. Pero para los demás lo que quedará es un emotivo viaje hacia la amistad y el amor sin barreras. Una versión indie y deliciosamente distorsionada de “Náufrago” que cambia a Wilson por un cadáver, bañada de humor, entrañas y emotividad sin caer en la sensiblería barata. Un torrente de emociones que supone lo más fresco y original que ha servido el séptimo arte en los últimos tiempos. Tan fresco como el cadáver Manny, el amigo más fiel y leal que uno pueda imaginar.


A favor: la exquisita dirección, el formidable uso de la música, y el trabajo de su pareja protagonista
En contra: que habrá quien la juzgue por su superficie

Calificación *****
Imprescindible

miércoles, 5 de octubre de 2016

LA CRÍTICA. The Neon Demon

Bloody Beauty
Ya lo decía la serie “Fama” en su cabecera. “Queréis la fama. La fama cuesta, y es aquí donde vais a empezar a pagar. Con sudor”. O también, en palabras del maestro Cronenberg, “La obsesión por la fama nos define”. En el ámbito de la moda, fama y belleza son intercambiables en sendas afirmaciones, y “The Neon Demon” nos sirve una crónica de esa fama/belleza lograda con algo más que sudor. La sangrienta lucha por alcanzar la perfección, por ser bella eternamente y vivir de ello.

La nueva película del laberíntico Nicolas Winding Refn escarba en los recovecos de un mundo superficial, deshumanizado, en el que la belleza es la moneda de cambio más valiosa, la que exhibe una cándida aspirante a modelo profesional que va escalando posiciones en el mundillo a costa de acumular el odio de sus compañeras de pasarela. Jesse –muy buen trabajo de Elle Fanning- es un alma pura, sin corromper, y su belleza e inocencia encandila a fotógrafos y diseñadores, algo que no sentará demasiado bien a las modelos que le rodean.

“The Neon Demon” vuelve a mostrar las pulsiones ya características de su director. Excelente factura técnica, formidable trabajo de fotografía y encuadres, y una atmosférica banda sonora de Cliff Martínez que vuelve a dar en el clavo y enrarece la cinta en cada fotograma. Winding Refn consigue incomodar e inquietar, logra un film malsano por momentos, y en este caso sí que hay un claro mensaje entre líneas que la aleja de la mucho más ensimismada “Only God Forgives”.


Y sin embargo, pese a tener algo interesante que contar, donde vuelve a fallar el cineasta es en las formas. Se pierde en escenas y subtramas que no llevan a ningún sitio –ese casero al que interpreta Keanu Reeves, ciertas tendencias necrófilas en uno de los personajes-, en símbolos visuales que pretenden tener un significado, pero que se quedan en la superficialidad como sus personajes. La sensación que deja es la de que le sobra mucho metraje, y de que esta historia la hemos visto antes en el cine, pero mucho mejor contada, sin tanta petulancia. “Black Swan”, la reciente “Maps to the stars” o, por qué no, “Showgirls”, ya trataban la misma temática, pero de manera menos errática, o por lo menos no con tanta pretenciosidad.


Sólo en sus veinte minutos finales, los mejores de todo el conjunto, el responsable de la estupenda “Drive” se acuerda de lo que tiene que contar y remata la historia con uno de los tramos más perturbadores del cine reciente. Un desenlace que la acerca al terror, de reminiscencias necrófagas, cuasi vampíricas, en el que la fama cuesta algo más que simple sudor. Es un monstruo que acecha a sus víctimas hasta que las fagocita.

A favor: el perturbador desenlace, la ya característica estética de su director
En contra: demasiado relleno que no lleva a ningún sitio

Calificación *1/2
Usted mismo

lunes, 3 de octubre de 2016

TAQUILLA USA. Tim Burton y sus peculiares niños lideran el box office

Fin de semana regular en la taquilla USA, sin un importante motor como fue el enorme taquillazo de “The Martian” hace un año.

El número uno, cómo no, ha ido a parar a manos de Tim Burton. Miss Peregrine’s House for Peculiar Children se convierte en la película líder del fin de semana con 28,5 millones de $, entrando dentro de las previsiones generales, pero dejando un sabor de boca agridulce al tratarse de un director tan amado por el público. De hecho, el dato es ligeramente inferior incluso al de “Dark Shadows”, uno de sus mayores batacazos en taquilla. Su ventaja con respecto a ella es que la respuesta del público y la crítica han sido muy positivas, lo que debería llevarla más lejos de los 79 millones que aquélla consiguió en 2012. Su desventaja, su enorme presupuesto de 110 millones, que tendrá que rentabilizar en el resto del globo. En todo el mundo, por ahora, registra 65 millones de $.

El otro estreno grande también venía rodeado de gran expectación, si bien su visibilidad no ha sido la adecuada. Enormes críticas y comentarios para Deepwater Horizon, lo nuevo de Peter Berg con Mark Wahlberg, que no consigue materializar lo mucho que está gustando en cifras. 20 millones de $ para un presupuesto también de 110 millones de $, que le va a costar rentabilizar. En todo el mundo lleva 33 millones de $, pero estamos ante una propuesta que no las tiene todas consigo en el mercado internacional.
Pero sin duda, el gran flop del fin de semana ha sido el de Masterminds, comedia que une los nombres de parte del reparto de la nueva “Ghostbusters” con los de Owen Wilson o Zach Galifianakis, pero que ha sido enterrada por la crítica y por el público con unos flojísimos 6 millones de $.

Ha sido en el ámbito limitado donde encontramos los mejores resultados. Los dramas Denial, con Rachel Weisz, y American Honey, con Shia Labeouf, laureados por la crítica, logran las mejores medias por copia de toda la cartelera. La primera se hace con 102.101$ en cinco salas, mientras que la segunda amasa 75.370$ en una. También merece la pena destacar los 7.150$ que el documental Do Not Resist ha recaudado en un solo cine.

En los mantenimientos, poco material destacable más allá del top 5, en una cartelera ya bastante débil. En tercer puesto encontramos Magnificent Seven, que cae un fuerte pero previsible 55% con 61 millones de $ recaudados en diez días. Acabará en torno a los 100 millones de $, cifra que ha superado ya en la taquilla mundial. Le siguen Storks, que en diez días se va a los 38 millones de $ con un buen mantenimiento, y que en todo el mundo supera ya su presupuesto de 70 millones, y Sully, ya con 105 millones de $ en su haber en Estados Unidos y 151 millones fuera. Aún le queda cuerda para rato, y más con la temporada de premios a la vuelta de la esquina.

Por último, destacar el comportamiento del drama deportivo de Mira Nair con Lupita Nyong’o y David Oyelowo Queen of Katwe, que en su segundo asalto pasa del puesto 22 al séptimo tras aumentar en más de mil salas, lo que le permite irse a los 3 millones de $ en diez días. Ha costado 15 millones, y aunque tiene pinta de ser uno de esos títulos de temática afroamericana que acaban dando en la diana entre el público, tendrá que sudar para ser rentable.

Fuente: Box Office Mojo

sábado, 1 de octubre de 2016

VOTACIONES 2016. Elige tus películas favoritas del mes de agosto


¿Eres de los que defiende la nueva “Cazafantasmas”? ¿Y “Suicide Squad? ¿Prefieres la animación de “Kubo and the two Strings” o la de “Mascotas”? ¿Quieres un viaje a bordo del Enterprise? ¿O prefieres pasar un mal rato con “Lights Out”? Abrimos las votaciones a mejores filmes del mes de agosto, un mes no con demasiados títulos estrenados en España, pero la mayoría de ellos interesantes y suculentos. Como de costumbre, las votaciones tendrán lugar en dos fases: una compuesta por las mejores películas de cada mes, que se cerrará el 15 de enero de 2017, y una segunda fase a la que irán todos aquellos títulos que hayan recibido 3 o más votos en la primera fase. El objetivo, elegir las mejores del año. Recuerden que se pueden escoger hasta un máximo de cinco por votación y todas las veces que lo deseen, así como introducir el título de alguna película de difícil distribución en España, siempre que el año de producción sea 2016. Y por supuesto, aún se puede votar por las mejores cintas de meses anteriores aquí.


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